UBICACIÓN: El Nevado Huaytapallana se encuentra localizado en el territorio del distrito de Huancayo, dentro del departamento de Junín. Este nevado presenta una altura de aproximadamente 5,200 msnm, y la nieve que cubre sus impresionantes picos, son el alimento que nutre las aguas del Río Mantaro, que también brinda agua potable a los pobladores del Valle.
- La distancia de la Plaza Constitución Huancayo - Posada Nevado Huatapallana 27.88 km (1 Hora Aprox.)
Nuestro Dios, nos regaló: la tierra, la vida y la naturaleza en su más extensa expresión. Agradecidos con él infinitamente.
Amigos, quiero compartir uno de los recuerdos que marcó nuestras vidas, este 2016. Una experiencia inolvidable, en el majestuoso Huaytapallana.
Con:
Ivan, Diego, Willian, Paola, Luis, John, Yulissa y Alan.
Emprendemos nuestra aventura desde la ciudad de Lima, en la noche de miércoles 23 de marzo 2016, con destino a la ciudad de Huancayo, Junín. Llegamos al día siguiente, inmediatamente nos dirigimos al mercado a probar un caldo de cabeza; después del desayuno transitamos por sus calles principales, siendo espectadores de un pasacalle con bailes típicos de la región, hicimos una parada en La Plaza de la Constitución de Huancayo.
Después de un breve descanso enrumbamos hacia los criaderos de truchas de "El Ingenio", donde dimos rienda suelta a nuestras pasiones gastronómicas, saboreando exquisitas truchas; en nuestro recorrido divisamos bellos paisajes; al retorno pasamos a Jauja, otra bella ciudad;
visitamos La Laguna de Paca, navegamos en sus tranquilas aguas, escuchando leyendas sobre el origen de la laguna; luego regresamos a la ciudad, nos echamos un descanso hasta el día siguiente.
visitamos La Laguna de Paca, navegamos en sus tranquilas aguas, escuchando leyendas sobre el origen de la laguna; luego regresamos a la ciudad, nos echamos un descanso hasta el día siguiente.
Día: 2 Huaytapallana.
Empieza nuestra travesía desde las instalaciones de la empresa de turismo, Tambo Tours, a unas cuadras de La Plaza de la Constitución, después de avanzar unos minutos hicimos una parada antes de salir de la ciudad, para hacer unas compras en una tienda especializada para alta montaña. Luego emprendemos nuestro recorrido por una trocha, junto con otros excursionistas que iban en el bus de la misma empresa. Después de casi dos horas de viaje llegamos a la localidad "Virgen de las Nieves", especie de campamento base; ordenamos nuestro almuerzo para el regreso; platos típicos de la zona: caldo de cordero, caldo de cabeza y trucha (sin imaginar que ese día no íbamos a regresar. Hasta este punto llega la movilidad. Continuamos a pie junto a otros grupos, que perseguían los mismos sueños que nosotros; llegar al majestuoso Huaytapallana, que significa el lugar donde se recogen las flores.
Luego de un largo recorrido camino arriba llegamos a una apacheta, y nos quedamos perplejos por un instante, el imponente Huaytapallana frente a nosotros, dicen que tiene una altitud de 5,557 msnm. Después de realizar unos pagos a la montaña, llegamos finalmente.
Escalamos al nevado, empezamos caminar como hombres en la Luna, por las huellas que dejábamos en cada paso; brincamos, jugamos como niños con la nieve; Diego, Iván, Paola, practicado un deporte de nieve según ellos, Wilian, Yulissa y mi persona explorando con cada paso y tomando unas fotos; Alan se quedó abajo (su trabajo era guiarnos, no subió). Sin darnos cuenta el tiempo iba transcurriendo rápidamente y vi cómo las primeras nubes iban formando su curso.
Bajamos cuidadosamente por las peligrosas pendientes, ya camino abajo en el cruce, el guía nos comentó, que el camino hacia el sur nos llevaría por las lagunas: Carhuacocha, Cocha Grande, yanahuncsha.
Escalamos al nevado, empezamos caminar como hombres en la Luna, por las huellas que dejábamos en cada paso; brincamos, jugamos como niños con la nieve; Diego, Iván, Paola, practicado un deporte de nieve según ellos, Wilian, Yulissa y mi persona explorando con cada paso y tomando unas fotos; Alan se quedó abajo (su trabajo era guiarnos, no subió). Sin darnos cuenta el tiempo iba transcurriendo rápidamente y vi cómo las primeras nubes iban formando su curso.
Bajamos cuidadosamente por las peligrosas pendientes, ya camino abajo en el cruce, el guía nos comentó, que el camino hacia el sur nos llevaría por las lagunas: Carhuacocha, Cocha Grande, yanahuncsha.
Bajamos lagunas abajo, observando tanta belleza, como la naturaleza las formó finamente de colores turquesa, con descansos cortos bajamos más y más, hasta que nos percatamos que un manto blanco cubría perfectamente todo a su paso; cruzando el río, mientras la densa neblina nos cubría todo, había poca visibilidad, seguimos el camino por instinto aventurero y sorteamos a bien un cruce que se nos presentó en la dirección al campamento base, en el otro cruce, el guía nos dijo: mejor por otro lugar, tomamos ese sendero, la neblina cada vez nos afectaba, muchos estaban cansados, con dolores de cabeza; bajamos demasiado, iba apareciendo quebradas, precipicios y sin darnos cuentas llegamos río abajo, ya era un hecho que estábamos perdidos, aún así con algo de valor íbamos adelante, hasta que un compañero nuestro se fracturó la pierna y nos rendimos, y para nuestra buena suerte nos topamos con una cabaña deshabitada y pasamos la noche ahí dándonos calor en conjunto ante la noche fría lluviosa, para que no nos de hipotermia, con mucha hambre sin almorzar, tuvimos que compartir su galleta de Paola, entre todos mínimamente.
Tratamos de agarrar sueño y no se podía, la noche se hizo muy larga y no tenía fin, se escuchaba como voces, salimos y no era nada; recuerdo cuando Paola me decía: no salgas, creo el cerro es mujer. Seguimos intentando dormir y nada, y no me explico de esos pasos agigantados que daba vueltas a la cabaña¿? Habrá sido puma, otra explicación convincente creo que no hay.
Nuevamente escuchamos voces al promediar la media noche, nos preguntamos si todos estábamos escuchando lo mismo, confirmado eran voces reales; eran los rescatistas, salimos de la cabaña, sacamos ichu hicimos fogata, armamos antorchas y gritamos todos: ¡Aquí estamos! ¡Aquí en la cabaña! ¡Bajen más! ¡Hay un herido! ¡Aquí! Finalmente los rescatistas guiados por los perros nos encontraron, dieron los primeros auxilios a nuestro compañero herido. Regresamos a campamento base nos esperaba un equipo de médicos, un buen caldo de cordero y la representante de la empresa con la movilidad. Retornamos a la ciudad de Huancayo, llegamos a las primeras horas del alba.
Nuevamente escuchamos voces al promediar la media noche, nos preguntamos si todos estábamos escuchando lo mismo, confirmado eran voces reales; eran los rescatistas, salimos de la cabaña, sacamos ichu hicimos fogata, armamos antorchas y gritamos todos: ¡Aquí estamos! ¡Aquí en la cabaña! ¡Bajen más! ¡Hay un herido! ¡Aquí! Finalmente los rescatistas guiados por los perros nos encontraron, dieron los primeros auxilios a nuestro compañero herido. Regresamos a campamento base nos esperaba un equipo de médicos, un buen caldo de cordero y la representante de la empresa con la movilidad. Retornamos a la ciudad de Huancayo, llegamos a las primeras horas del alba.
Agradecimientos:
A los valerosos rescatistas,
Emerson y chiki,
A nosotros mismos, por el trabajo en equipo, por hacer lo que nos apasiona y por mantenernos unidos ante las adversidades.
Éxitos para todos. Gracias. John.
ÁLBUM DE FOTOS:
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